Es universalmente reconocido y es un hecho que los perros son algunos de los amigos más leales del ser humano. Su dedicación y amor hacia nosotros, los humanos, son tan profundos y arraigados que no dudarían ni un segundo en enfrentarse al peligro para proteger nuestras vidas. Entre todos los peludos, existe una categoría muy especial, compuesta por “héroes”, pero llamarlos así quizás sea aún quedarse corto. Son los perros de rescate, animales de socorro entrenados específicamente para responder con valentía y determinación en situaciones de emergencia que involucran a seres humanos.
El 28 de abril se celebra precisamente el Día Internacional del Perro de Rescate así que, ¿por qué no descubrir algo más sobre nuestros valientes amigos de rescate de cuatro patas?
Valientes, curiosos y atentos: así son los perros de rescate.
Los perros de rescate no solo se basan en su instinto natural, sino que actúan con precisión y control, en contextos extremos, siguiendo ciertos comandos, convirtiéndose en héroes silenciosos capaces de marcar la diferencia para la salvaguardia de nuestras vidas. El entrenamiento de los perros de rescate es un proceso largo y desafiante, que no solo requiere una inclinación natural del carácter del perro, sino también una estrecha colaboración con su manejador. Juntos, se preparan para enfrentar desafíos y complejidades, construyendo un vínculo que va más allá de la relación de amor natural que se puede establecer entre el hombre y su mascota.
Un papel específico para cada perro de rescate
Cada perro de rescate es un símbolo vivo de dedicación y compromiso, un testimonio del extraordinario poder que puede derivar del binomio especial “hombre-perro”. Su presencia y su trabajo son fuente de inspiración, nos sorprenden todos los días con su valentía y amor incondicional, y de esto solo podemos estar agradecidos.
Es importante saber que los perros de rescate se destacan en muchas operaciones de rescate. Cada perro, de hecho, está destinado a especializarse en una disciplina específica. Pero, ¿cuáles son las que existen hoy en día? Vamos a descubrirlo ahora.
Perros de rescate alpino (avalanchas o superficie)
El perro de rescate alpino, que se distingue entre perro de avalancha y de superficie, se entrena para jugar un papel crucial cuando se trata de localizar personas sepultadas bajo la nieve después de una avalanche. El entrenamiento de estos pequeños y valientes héroes está altamente enfocado en desarrollar su capacidad olfativa, gracias a la cual pueden detectar olores humanos bajo capas importantes de nieve.
Estos perros están acostumbrados a operar manteniendo la calma y concentración en condiciones altamente extremas, como temperaturas frías y terrenos inestables. La actividad que realizan estos fantásticos animales, junto con el personal de rescate alpino, es realmente fundamental y valiosa durante todo el año, pero especialmente en invierno, cuando lamentablemente hay más problemas.
Las razas más predispuestas para el rescate alpino son, por ejemplo, el Pastor Alemán Gris, el Pastor Belga Malinois y el San Bernardo.
La nieve no afecta el olfato perfecto de los perros de rescate en montaña.
Perros de rescate entre los escombros
El perro de escombros es una figura fundamental en las operaciones de búsqueda y rescate tras desastres naturales o causados por el hombre, eventos que pueden afectar la salvaguarda de muchas vidas humanas, como terremotos, derrumbes o explosiones que debilitan la estructura de edificios. Estos peludos son entrenados específicamente para localizar personas sepultadas bajo los escombros, a menudo en condiciones extremadamente peligrosas e inestables.
El entrenamiento de estos pequeños héroes tiene como objetivo desarrollar las habilidades olfativas y cognitivas del animal, para localizar lo más rápidamente posible a las personas atrapadas bajo los escombros.
Gracias a estos perros, el tiempo de búsqueda se reduce, aumentando así la probabilidad de salvar muchas vidas humanas. Estos corazones de cuatro patas representan un recurso importante para los equipos de rescate, que pueden confiar en un “colega” especial con sentidos mucho más desarrollados que los humanos, y por lo tanto más hábil y dispuesto a la búsqueda. Estos perros de rescate tienen la capacidad de identificar olores hasta 100.000 veces más fuertes que nosotros, pueden captar ondas sonoras hasta 40.000 hertzios y escuchar entre 35.000-40.000 vibraciones por segundo… podemos decir que son, de hecho, héroes, ¡superhéroes indispensables para la salvaguardia de las vidas humanas!
Los perros de rescate en escombros más indicados son el Pastor Alemán, el Border Collie y el Maremmano.
Incluso en las emergencias más críticas, los perros de rescate saben moverse entre los escombros.
Perros de rescate acuático
El perro de rescate acuático es un compañero excepcional en operaciones de salvamento en entornos acuáticos. En particular, estos perros son entrenados para ayudar a personas en riesgo de ahogamiento y en tareas de recuperación en agua, ya sea en lagos o en el mar abierto.
El entrenamiento de los perros de rescate acuático es altamente especializado y se enfoca en desarrollar sus habilidades natatorias, resistencia, obediencia e instinto de rescate. Estos campeones deben ser capaces de nadar largas distancias, enfrentarse a corrientes fuertes y actuar con firmeza incluso en situaciones de emergencia.
Para convertirse en perros socorristas, se requieren ciertas características importantes, como, por ejemplo, pesar más de 20 kg para tener la fuerza necesaria para sostener a una persona y llevarla a salvo, tener una buena relación con el agua y un pelaje suficientemente largo para protegerse del frío. Estos perros suelen ser entrenados también para recuperar objetos o dispositivos de rescate, como cuerdas o salvavidas, facilitando las operaciones durante el salvamento. Por eso, su dedicación y valentía los convierten en aliados invaluables en operaciones de rescate en el mar, ríos y lagos. Para dar una idea estadística de su importancia, los perros socorristas en Italia salvan la vida de unas 35 personas cada año.
Los Rescue Dogs por excelencia son el Golden Retriever, el Labrador, el Terranova, el Perro de Agua Portugués y muchas otras razas similares en tamaño y características.
En aguas lénticas o en corrientes, los perros de rescate acuático son nadadores incansables.
Las razas más comunes de perros de rescate
Como ya hemos mencionado, todos los perros pueden ser entrenados para el rescate, aunque ciertas razas tienen habilidades naturales que, bien gestionadas, pueden llevar a grandes resultados en situaciones de emergencia.
Fuerza, resistencia, agudeza y disposición para escuchar son las principales características de un perro de rescate. ¿Cuáles son las razas que reúnen estas cualidades? Aquí te presentamos algunas:
Pastor Alemán y Pastor Belga
El Pastor Alemán y el Pastor Belga están entre las razas más versátiles y populares cuando se trata de perros de trabajo. Debido a su inteligencia, valentía y resistencia, podemos decir que son la raza perfecta para llevar a cabo actividades de rescate. Entre las imágenes que seguramente la mayoría de nosotros tiene en mente, está la del súper Comisario Rex, el perro policía enfrentándose a casos por resolver y pruebas de habilidad.
¡No solo en las películas o series de televisión, también en la realidad es así! Las unidades caninas de las Fuerzas del Orden a menudo eligen estas razas para tener a su lado un compañero realmente infalible cuando se trata de garantizar seguridad en situaciones de emergencia.
El más conocido de los perros de rescate: ¡el perro policía!
Labrador y Golden Retriever
Los Labradores y los Golden Retrievers tienen características muy similares. Son conocidos por su excelente sentido del olfato, su carácter dulce, amistoso y confiable, además de tener una fuerza incansable y una constitución que les permite soportar peso, así como un pelaje largo o un denso subpelo capaz de resistir las inclemencias del tiempo. Además, son verdaderos amantes de la natación. Entonces, ¿qué papel es mejor para ellos que ser perros de rescate acuático?
Un ejemplo del profundo servicio de un perro de rescate en el agua es la dulce Mira, una Labrador color crema de la Scuola Italiana Cani Salvataggio Tirreno. Esta heroína de cuatro patas, que lamentablemente falleció hace poco, salvó muchas vidas humanas durante su vida, con al menos 11 intervenciones en las que su ayuda fue crucial. Pero la que más destaca ocurrió en el verano de 2021 en Sperlonga (Latina), donde salvó a tres familias, incluyendo a 14 adultos y 8 niños.
Gracias, Mira, por tu valentía y tu bondad, siempre te estaremos agradecidos por haberte entregado a nosotros… ¡buen viaje al puente del arcoíris!
¿Emergencia en el agua? ¡El Golden Retriever se encarga!
Border Collie
Esta raza es reconocida desde siempre por su increíble inteligencia, energía y obediencia. No es de extrañar que los Border Collies sean considerados perros de trabajo en múltiples áreas, desde el pastoreo hasta operaciones de rescate donde se destacan por sus dotes naturales. Son utilizados frecuentemente para la búsqueda de personas desaparecidas y operaciones de socorro en ambientes difíciles, gracias a un olfato y una agilidad especialmente desarrollados.
Máxima atención a los detalles y gran disposición. El Border Collie es perfecto para las operaciones de rescate.
San Bernardo
¡Tamaño imponente, gran resistencia al frío y… un barril colgado al cuello!
El San Bernardo es el perro por excelencia de las operaciones de rescate en ambientes alpinos, su hábitat ideal, donde se mueve con seguridad y sin temer las bajas temperaturas. Sus características lo hacen ideal para desempeñar el papel de perro de rescate especializado en búsquedas en la nieve tras fenómenos como las avalanchas.
Si quieres descubrir qué otras razas son más adecuadas para ambientes montañosos y bajas temperaturas, lee este artículo.
El San Bernardo es el perro de montaña por excelencia.
Cómo entrenar a los perros de rescate
El entrenamiento de los perros de rescate es un proceso complejo que requiere tiempo y mucha dedicación.
De hecho, el entrenamiento no solo involucra al peludo, sino también a su manejador, con quien el perro debe establecer una relación de extrema confianza y colaboración. Hombre y perro deben aprender a pensar y actuar como un organismo único, coordinado, competente y en completa armonía.
Es por eso que el entrenamiento del perro de rescate es una dinámica que debe llevarse a cabo con pasión, determinación y, sobre todo, mucha conciencia.
Pero, ¿cómo se convierte un peludo en un perro de rescate? Aquí algunos primeros consejos, aunque siempre te recomendamos contactar con organismos como la Protección Civil de tu zona para obtener información más detallada sobre el tema.
Entrenamiento básico de los perros de rescate
Educar a un perro de rescate requiere atención específica. De hecho, en Italia hay muchas escuelas que se encargan de este proceso de entrenamiento. El primer paso que debemos dar es asegurarnos de que nuestro peludo esté en perfecto estado de salud. Una visita para un chequeo completo con el veterinario puede revelar el estado de bienestar del perro. Es fundamental comprender si nuestro peludo tiene la idoneidad y las habilidades necesarias para convertirse en un perro de rescate.
Tener ideas claras desde el primer día es importante: emprender este tipo de camino requiere compromiso y dedicación de nuestra parte, pero también curiosidad e interés por parte de nuestro perro. Algunas razas, como ya sabemos, son más adecuadas que otras, pero lo que podemos hacer es verificar el interés real de nuestro peludo en este tipo de actividades, asegurándonos de que pueda disfrutar de ellas.
Elegir la escuela adecuada es otro paso fundamental, por ejemplo, una asociación coordinada por la UCS (Unità Cinofila di Soccorso, o sea Unidad Canina de Rescate), que ofrece programas formativos y de entrenamiento básico desde los primeros 5 meses de edad para integrarse en el sistema de protección civil.
Nuestro perro deberá tener una sólida educación básica que involucre la relación con su compañero humano, los comandos básicos, pero también la socialización con personas desconocidas y con otros perros, así como estar ya acostumbrado a actividades físicas que incluyan obstáculos y saltos. Una idea para empezar ya desde los primeros meses de vida a crear las bases de una relación fuerte y duradera podría ser asistir a una Puppy Class, que se puede comenzar desde los 3 meses del cachorro.
El entrenamiento como perro de rescate puede comenzar ya a los 4 o 5 meses del cachorro.
Entrenamiento específico de los perros de rescate
Dependiendo del tipo de camino que se desee emprender con el perro, habrá cursos específicos que lo prepararán de forma focalizada para actividades particulares, que pueden centrarse en la búsqueda entre escombros, en la nieve o en el agua.
Por ejemplo, el entrenamiento para la búsqueda entre escombros se lleva a cabo en etapas de dificultad progresiva. Desde simples juegos de estimulación mental hasta simulaciones reales de búsqueda entre restos de edificios, rocas y otros materiales.
La duración del entrenamiento puede depender de varios factores, como la relación de confianza con nuestro compañero de cuatro patas, sus capacidades, nuestro compromiso y constancia.
La simulación de situaciones reales es fundamental para el entrenamiento del perro de rescate.
Obtención de la certificación de perro de rescate
Una vez que el perro ha completado el curso de entrenamiento y ha adquirido las competencias necesarias para realizar operaciones de rescate, es momento de obtener la certificación que acredite sus habilidades de rescate.
Ya casi está. ¡Un último examen y será un verdadero perro de rescate!
El vínculo entre el manejador y el perro de rescate
Uno de los aspectos más sorprendentes de los perros de rescate es el vínculo especial que se crea entre ellos y sus manejadores.
Esta asociación va más allá de la simple relación entre un perro y su compañero humano. Los manejadores y sus perros trabajan juntos como un equipo coordinado, confiando plenamente el uno en el otro y enfrentando juntos los desafíos extremos que surgen a diario.
Los manejadores desempeñan un papel crucial al guiar y apoyar a sus fieles compañeros durante las operaciones de búsqueda y rescate, interpretando las señales del perro y proporcionándole instrucciones claras y precisas.
El vínculo sólido entre manejador y perro lo es todo.
A cambio, los perros de rescate responden con pasión y sacrificio, poniendo en práctica sus habilidades para localizar a personas en peligro y ofrecerles una ayuda valiosa que a menudo puede salvar sus vidas.
Los perros de rescate son verdaderos héroes de cuatro patas que trabajan incansablemente con devoción para ayudar al hombre en las situaciones más difíciles. Su papel en las operaciones de rescate es insustituible y su dedicación y competencia son un tributo a la extraordinaria inteligencia y al vínculo único que existe entre el hombre y el perro.
¿Cuántas vidas han sido salvadas hasta hoy gracias a estos pequeños grandes héroes, y cuántas más tendrán la suerte de ser rescatadas del peligro…? ¡Gracias, pequeños corazones de cuatro patas!
Artículo redactado con la asesoría de Chiara Festelli, Educadora Canina.
