Ha llegado el verano y, como cada año, nos enfrentamos a temperaturas muy altas.
No sólo las personas sufrimos el calor, también los perros y gatos sufren, y para colmo no pueden sudar y por lo tanto tienen menos posibilidades de defenderse cuando las temperaturas se elevan.
Existen algunos mecanismos que nuestras mascotas pueden poner en marca para bajar su propia temperatura corporal – los perros jadean con la lengua colgando y los gatos pasan más tiempo del normal a limpiarse el pelo para refrescarse un poco – pero lo más importante es tomar precauciones.
De hecho, una exposición excesiva al calor o a los rayos solares puede desencadenar en perros y gatos un golpe de calor o un golpe de sol, que en ambos casos pueden manifestarse con síntomas específicos, como por ejemplo:
- Jadeo excesivo
- Encías y lengua enrojecidas
- Temblores
- Vómito
- Diarrea
¿Y entoces qué hacemos si nuestro perro o gato está acalorado?
Veamos algunos remedios contra el calor para nuestros amigos de cuatro patas.
Deja agua fresca a disposición
Es importante que no falte nunca agua fresca en casa, de manera que los animales puedan beber cada vez que lo necesiten (¡y con las altas temperaturas beberán más de lo normal!).
Por lo tanto, deja algunos cuencos llenos de agua repartidos por la casa, teniendo en cuenta que no esté demasiado fria y manteniéndo el agua siempre fresca y limpia.
Evita el aire acondicionado
Tampoco para nosotros el aire acondicionado es lo mejor, y por ello es mejor evitar el aire acondicionado con perros y gatos, sobretodo si pasan libremente de la casa al jardín: de hecho, podría crear fuertes cambios de temperatura, con consecuencias desagradables para la salud.
Sería mucho mejor utilizar un ventilador para mover el aire y refrescar el ambiente: ¡ten cuidado y no orientes el ventilador directamente hacia tu mascota!
Llévale a pasear en las horas más frescas
Cuando hace mucho calor, es mejor salir a pasear en las horas en las que el sol no pega demasiado: como a primeras horas de la mañana o a hacia el atardecer, y sobre todo evitar paseos al mediodía o en las primeras horas de la tarde.
También la elección del sitio es importante: si es posible, lleva a tu perro a pasear donde haya sombra fresca, sombra de vegetación o edificos, y en general evita los recorridos que prevean tramos demasiado largos expuestos al sol.
Lleva siempre agua contigo
Si tienes que salir con tu perro o tu gato, a pie o en coche, acuérdate siempre de llevar contigo una botella de agua, para calmar la sed de tu mascota también durante el paseo: de hecho, con el calor somos más vulnerables a la deshidratación, también los perros y los gatos, y mantenerse hidratados es fundamental para evitar los golpes de calor.
Protégelos del sol
Aunque evitar los lugares más soleados sea lo mejor, a veces no es posible: en estos casos puedes proteger de los rayos del sol a tu perro o tu gato utilizando productos específicos.
El Spray Protección Solar de Yuup! es una excelente solución, que protege el pelo y la piel de los rayos UVA, UVB e infrarrojos, es fácil de usar: vaporizar y peinar.
¡Cuidado con la temperatura del suelo!
Nosotros no lo tenemos en cuenta porque llevamos siempre zapatos o sandalias, pero nuestras mascotas van a todos lados “con los pies descalzos”, y cuando hace mucho calor se arriesgan a quemarse las patas andando sobre superficies sobrecalentadas.
Por lo tanto, antes de dejar salir al perro o al gato, comprueba que el suelo no esté demasiado caliente apoyando la mano en el suelo durante 15 segundos: si puedes soportar la temperatura, ¡seguramente lo soportará también tu amigo de cuatro patas!
Como medida preventiva, unta en las almohadillas el Bálsamo Protector Yuup!, ideal como protección de agentes dañinos como el frío, hielo, calor y sal.
Mójales con agua
Por último, para darles alivio contra el calor, moja las patas y la cabeza de tu amigo de cuatro patas con el agua, mejor templada o que no sea fría.
¡No hay nada mejor cuando los perros y gatos tienen calor!